VINCENT VAN GOGH , EL BUSCADOR DE BELLEZA (SEGUNDA PARTE)

En la primera parte de este relato sobre la vida de Vincent Van Gogh(1853-1890) le habíamos dejado en Bruselas en el año 1880, poco después de decidir abandonar el camino de la religión para dirigir sus pasos hacia el arte. Gracias a la ayuda económica de su hermano Theo (1855-1891), que desde este momento apartará siempre una parte de su sueldo cada mes para enviárselo a Vincent , éste puede pagarse la inscripción en la Academia de Bellas Artes de Bruselas además de la comida y la ropa precisa para adecentar un poco su descuidado aspecto. Pero si había decidido cambiar de vida lo que no había cambiado era su carácter intempestivo y en ocasiones violento, siempre indomable e incapaz de sujetarse a unas normas establecidas, lo que hará que una vez más abandone sus estudios. En abril de 1881 decide regresar a la casa donde viven sus padres en la localidad de Etten , donde no es muy bien recibido por su padre pero le concederá el permiso para que comparta la vida con ellos. Su padre, que nunca le había hecho manifestaciones de cariño,diría sobre su hijo mayor «No podemos cambiar el hecho de que es un excéntrico». Los primeros meses allí, a pesar de la fría relación entre padre e hijo, son de tranquilidad para Vincent que además recibe la visita de su hermano Theo, que ahora trabajaba como marchante en París .
Pero si algo iba a endulzar este tiempo en Etten fue la visita durante el verano de su prima, Cornelia Adriana Vos-Sticker (1846-1918), a la que llamaría Kee. Ella había enviudado hacia poco tiempo y tenía  siete años más que Vincent, pero su simpatía y amabilidad conquistaron a un Vincent inexperto en estas lides del corazón porque, recordemos, que apenas un año antes había escrito a su hermano que nunca había estado con una mujer y eso era una de sus principales aflicciones. Vincent se enamora con la misma intensidad que había puesto a la hora de cuidar a los mineros de Borinage, es decir, dándolo todo hasta el extremo de que aquellos que contemplaban su comportamiento podían llegar a juzgarle por loco. El pintor confundía la amabilidad con la que le trataba Cornelia con amor y cuando después de muchos paseos compartidos por los campos de Etten se decide a declararse la respuesta por parte de ella es un rotundo «No, jamás, jamás» como escribiría Vincent a su hermano Theo en una carta fechada el 3 de noviembre de 1881. La viuda decide marcharse a Amsterdam, pero Vincent no cesará en su empeño, la escribe nuevas cartas insistiendo en su propuesta matrimonial e incluso viaja hasta Amsterdam donde llega a molestar a la familia de Cornelia. Esta obsesionado con ella y no acepta el no por respuesta. Escribe «Desde el principio me he dado cuenta de que, a menos que me entregue por completo, sin restricciones, con todo mi corazón, no tendré ninguna oportunidad, y aún así la oportunidad es pequeña, pero ¿qué me importa si tengo muchas o pocas oportunidades? ¿Debo considerar esto si yo la amo? Gracias a Dios, yo la amo.»

Fotografía de Cornelia Adriana Vos-Sticker (1846-1918) ,junto a su hijo Jan. Cornelia era hija de una hermana de la madre de Vincent, y cuando viaja a Etten en el verano de 1881 hacía poco tiempo que había enviudado. Como podéis ver por la imagen no era una mujer de gran belleza pero si estaba dotada de un carácter amable y simpático, suficiente para un corazón solitario como el de Vincent Van Gogh. Aunque ella rechazó la propuesta de matrimonio del pintor, éste no se rendía y escribe ««Considero que ese «no, nunca» es un bloque de hielo que presiono sobre mi corazón para derretirlo. ¿Quién ganará, el frío del hielo o el calor de mi corazón?» y tampoco acepta las palabras de la familia de Cornelia que tratan de disuadirle y convencerle que debe dejar tranquila a Cornelia porque ella no le ama ««Las personas mayores consideran que todo está ya terminado y quieren forzarme a abandonar. Quieren convencerme de que ella no va a cambiar, luego ellos temen que ella cambie de idea» e insiste «Kee tiene escrúpulos de conciencia de tener un nuevo amor. Yo comprendo y respeto ese sentimiento, pero yo trato de crear algo nuevo, que no ocupe el lugar del viejo, pero que tenga derecho a tener su propio lugar». La última discusión con la familia con la famosa escena de Vincent poniendo su mano sobre la llama de una vela hasta que le dejaran hablar con ella parece que calmó a Vincent y la situación se enfrió . Poco después otro nuevo amor llegaría a la vida de Vincent (imagen procedente de http://www.aloj.us.es )
Según cuenta la escritora y periodista Elizabeth Lunday en su «Vidas secretas de grandes artistas» «una noche puso una mano en la llama de una vela y declaró que no la movería de allí hasta que le dejaran ver a su prima;se desmayó de dolor antes de que el tío de Cornelia pudiera apagar la llama» Este comportamiento no le ayudó , como podéis imaginar, a conquistar el corazón de su prima y Vincent sufría un nuevo desengaño amoroso. Este rechazo afecta aún más al comportamiento de Vincent, que se vuelve más violento de lo habitual y a su regreso a Etten se suceden los enfrentamientos con su padre hasta que en diciembre de ese año de 1881 tienen una gran discusión por temas religiosos y su padre Theodorus Van Gogh(1822-1885) le echa de casa . Vincent escribe a su hermano Théo que sigue viviendo en París «Pero, como puedes ver, estoy nuevamente en La Haya; por Navidad tuve una disputa bastante grave con nuestro padre, que llegó al extremo de decirme que sería mejor que abandonase la casa. Lo dijo tan enérgico que me fui aquel mismo día» En efecto, se encuentra en La Haya en casa de un primo de Vincent que además es pintor Anton Rudolf Mauve (1838-1888), un pintor de estilo realista que lograría sus mejores obras con la representación de personas y animales al aire libre.

«Pastora con un rebaño de ovejas» de Anton Rudolf Mauve , un pintor realista que enseñaría a Van Gogh diferentes técnicas pictóricas y le influiría en su primera etapa como pintor aunque su relación, como solía suceder con todas las amistades de Vincent, se rompió después de una discusión. Como ya veíamos en la primera parte de esta historia el propio Vincent reconocía lo difícil que era su carácter «Suelo ser una persona espantosa, propensa a la melancolía y el mal humor ;tengo hambre y sed de simpatía, pero si no la encuentro me trae sin cuidado e incluso echo más leña al fuego»  (imagenes procedente de http://boverijuancarlospintores.blogspot.com )
Mauve iba a ejercer una gran influencia en estos comienzos de Vincent como pintor , enseñándole las diferentes técnicas pictóricas, pero aunque Vincent agradece sus enseñanzas no está de acuerdo con la orientación de su pintura, a él no le interesa trasladar al lienzo la realidad tal y como es sino como él la ve, la interpretación de aquello que ven sus ojos. Las discusiones entre los dos pintores son cada vez más frecuentes hasta que , una vez más en la convulsa vida de Vincent, esta relación de amistad también se rompe. Estamos en el año 1882 y en este mismo año en que primero trabaja y aprende al lado de Mauve y después se separa de él conocerá a un nuevo amor en su vida, Christina Clasina María Hoornik(1850-1904), a la que él llamaría Sien .No era una mujer bella, tenía tres años más que Vincent, el rostro picado de viruela , era bebedora y fumadora, una niña de cinco años y estaba embarazada. La había encontrado en La Haya en el mes de enero, poco después de sufrir el desengaño de Cornelia. Así se lo cuenta meses después a su hermano Theo en una carta «Este invierno me encontré una mujer embarazada que tenía que hacer la calle para ganar su pan, ya sabes cómo. La tomé como modelo, y he trabajado con ella todo el invierno… he podido protegerla a ella y a su hija del hambre y del frío compartiendo con ellos mi propio pan. Comencé una nueva vida, no a propósito, sino porque tuve la oportunidad de empezar de nuevo y no rehusé hacerlo.»

Ya sabemos por esta carta que su nuevo amor es una prostituta, tres años mayor que él y embarazada a la que primero acogerá por caridad y lástima hacia su situación pero de la que luego se enamorará, o al menos creerá estar enamorado . Vincent cuidará de ella, la irá a visitar al hospital cuando tiene a su hijo , al que pondrá de nombre Wilhen, como si él fuera el padre e incluso pinta las paredes de la habitación que reserva para el pequeño. Durante un año conviven como si se tratara de un matrimonio . Vincent oculta la existencia de Sien a sus padres por temor a la reacción de estos y sólo escribe sobre ella a su hermano Theo , que tampoco aprueba esta relación, al tiempo que en la mente de Van Gogh sigue recordando a su anterior amor , Kee, y sus palabras parecen mostrar que sus sentimientos por Sien no son tan intensos, ni siquiera podríamos hablar de verdadero amor a juzgar por estas palabras « Si K. me hubiese escuchado el verano pasado las cosas podían haber transcurrido de otra manera.» y en otra carta añade «Mi sentimiento por ella es menos apasionado que el que sentí por Kee, pero el afecto que siento por Sien es lo único que soy capaz de dar. Ella y yo somos dos seres desgraciados que se ayudan mutuamente, que llevan sus problemas juntos y así la infelicidad se torna en gozo y lo insoportable en llevadero.»


Dibujo realizado por Vincent de Clasina María Hoornik(1850-1904), que en 1882 , cuando convive con el pintor en La Haya apenas tiene 32 años pero por el dibujo vemos a una mujer envejecida por la dureza de la vida que llevaba . La había conocido en enero de 1882, apenas un poco después de terminar sus intentos de conquistar el corazón de Cornelia Adriana vos Sticker, lo que demuestra que su afecto no era tan profundo como él pretendía. Pero él lo explica así en una de sus cartas ««Sentí que mi «Ella o ninguna» había muerto. Entonces, no enseguida, pero sí muy pronto, sentí que el amor había muerto dentro de mí. Un vacío, un infinito vacío ocupó su lugar… Pero después de la muerte hay una resurrección.» y añade para completar su justificación después del revuelo que había originado su anterior lance amoroso que había olvidado en menos de un mes » Comencé una nueva vida, no a propósito, sino porque tuve la oportunidad de empezar de nuevo y no rehusé hacerlo.» (imagen procedente de http://www.aloj.us.es )

En realidad, Vincent era un mendigo de amor, necesitaba que le amasen pero nadie lo hacía y para protegerse de ello su imaginación creaba sentimientos amorosos que no existían en la realidad. Ni Kee le había correspondido nunca ni tampoco Sien le amaba, hallaba en él una protección que no tenía en nadie más, pero no era amor. Después de un año, en septiembre de 1883 Vincent abandona a Sien . Llega a acusar a Théo de la ruptura por el temor de Vincent a perder la asignación mensual que le enviaba su hermano, que siempre se había opuesto a esta relación y aún más cuando supo que le había contagiado a Vincent la sífilis y la gonorrea. Vincent escribe a Theo cuando vuelve a encontrarla un día en la calle, de nuevo ejerciendo la prostitución «La encontré en una situación tan lamentable, que me partió el corazón, y esto será una barrera insuperable entre tú y yo, a menos que ella pueda ser salvada.» Después de este nuevo fracaso en su vida sentimental ,que siempre tenía una gran influencia en su equilibrio mental, Vincent se traslada a Drente, una de las doce provincias de los Países Bajos, situada al norte. Durante los meses siguientes pinta paisajes al oleo, de colores oscuros con los que Vincent llevaba al lienzo el profundo sentimiento de soledad que le embarga en esta época de su vida.
Por fin, después de tres meses en Drente ,decide regresar con su familia en diciembre de 1883. Ahora se encontraban en Nueten, donde había sido trasladado su padre , y aunque podríamos pensar que después de todas estas vicisitudes habría sido rechazado por sus padres es, por el contrario, bien recibido. Durante todo el año 1884 Vincent se dedica a pintar a los campesinos , sus rostros y sus trabajos, utilizando tonos oscuros y apagados quizás para representar la opresión y pobreza en la que vivían muchos de ellos. Los siguientes dos años serán de una intensa actividad en los que llega a pintar más de doscientas obras. Parece que encuentra  por fin algo de estabilidad emocional y en otoño de 1884 de nuevo el amor llama a su puerta. En esta ocasión será una vecina de Nueten llamada Margot Begemann , hija del fallecido pastor de Nueten al que el padre de Vincent había sustituido. Era la más pequeña de cinco hermanas pero ya era una mujer en edad madura pues tenía cuarenta y tres años , mientras que Vincent apenas tenía treinta y un años y no será la belleza la que cautive a Vincent que escribe sobre ella ««Es una pena que no la conociese hace diez años, ahora da la impresión de ser un violín de Cremona que ha sido estropeado por manos chapuceras. Cuando yo la conocí, ya estaba muy estropeada, pero originalmente era una persona de una gran valía.»

Fotografía de Margot Begemann (1841-1907) que tenia doce años más que Vincent y que físicamente, a juzgar por sus palabras, no le resultaba nada atractiva aunque no se puede decir a tenor de las fotografías y dibujos que acabamos de ver de las otras mujeres a las que amó que ella fuera mucho menos agraciada que las anteriores. Podemos decir de ella que es la única mujer que conozcamos que amó de verdad a Vincent, aunque él no le correspondió con la misma intensidad y se olvidaría de ella poco después de que Margot se intentara suicidar con estricnina en respuesta a la prohibición de la familia de ella a que siguiera viéndose con el pintor. Ella nunca le hizo daño, quizás por ser la que le amaba de verdad y él también la guardaba afecto y años después la regalaría un cuadro que envió a través de una de sus hermanas (imagen procedente de http://www.ggallery.com )  
Una vez más no siente un amor verdadero por ella aunque si afecto , si bien él siempre tiende a engañarse a sí mismo sobre sus sentimientos , pero se siente en parte halagado por el amor que Margot si le profesa, cuando ya se había resignado a ser lo que la sociedad de entonces llamaba una solterona. Sin embargo, la familia de ella no veía con buenos ojos esta relación ,entre otros motivos por la diferencia de edad entre ambos y , seguramente, por la fama de desequilibrado que acompañaba a Vincent. Ante la oposición familiar Margot toma una decisión desesperada y trata de suicidarse con estricnina , aunque finalmente no lo consigue. De la poca profundidad de los sentimientos de Vincent hacia Margot es una demostración que después de este intento de suicidio Vincent apenas la mencionaría de nuevo en sus cartas a Theo. Habría que decir que los amores de Vincent no le dejaban heridas muy profundas pues, como hemos visto, a los pocos meses de romper una relación podía iniciar otra como si la anterior no hubiera existido. Y también es curioso observar que todas estas mujeres eran mayores que él y con circunstancias familiares adversas, bien porque la familia se opusiera o porque sus vidas fueran particularmente difíciles. Es como si él buscara relaciones difíciles deliberadamente pero como no soy psicólogo dejaré a otros el análisis de esta conducta.
El 26 de marzo de 1885 su padre Théodorus Van Gogh sufre una apoplejía y muere. Su madre había sufrido un accidente poco antes al caerse en la estación de tren , pero ya se había recuperado. Apenas un mes después , en abril de 1885 termina la que iba a ser su obra más importante hasta entonces «Comedores de patatas» en la que vuelve a incidir en uno de los temas principales de su pintura en esta época, la pobreza de las clases obreras .Trata de reflejar a través de los tonos oscuros de su pintura la desesperanza y la miseria en la que se desarrollaba la vida de estas personas por las que Vincent sentía una profunda compasión. Por vez primera centra su atención no en un único personaje sino en cinco personas sentadas alrededor de una mesa. Sobre ella escribiría el propio pintor «He querido poner conscientemente de relieve la idea de que esa gente que, a la luz de la lámpara come patatas sirviéndose del plato con los dedos, trabajó asimismo la tierra en la cual las patatas han crecido; este cuadro, por tanto, evoca el trabajo manual y sugiere que esos campesinos merecen comer lo que honestamente se han ganado. He querido que haga pensar en un modo de vivir muy diferente al nuestro. Así pues, no deseo en lo más mínimo que nadie lo encuentre ni siquiera bonito ni bueno» Como preparación para este cuadro había realizado con anterioridad más de cuarenta retratos de campesinos, buscando los rostros que incluiría en esta obra.

La obra más importante de la primera época de la obra de Vincent Van Gogh, «Los comedores de patatas» realizada en 1885 y que actualmente se conserva en el Museo Van Gogh de Amsterdam. Vincent había estudiado dibujo con el pintor realista Jean François Millet (1814-1875)  en Bruselas . Millet tenía como protagonistas principales de sus obras a los campesinos , pero unos campesinos idealizados como seres inocentes en contraposición a la degeneración del hombre urbano, algo así  como el buen salvaje de Rousseau. Van Gogh no estaba de acuerdo con esta manera de representar al campesino, él prefiere representarlos tal y como son, sin adornos y sin embellecer la realidad, pues así podía mostrar a lo que conducía la miseria  en la que vivían estas personas . El tono oscuro de la pintura de estos años primeros en la producción de Vincent se dirigen a acentuar la desesperanza y angustia de sus personajes (imagen procedente de http://www.todo-sobre.com )
Vincent esperaba que la calidad de esta obra fuera reconocida por los ambientes artísticos, pero la acogida es muy fría y vuelve a sentirse inseguro sobre su trabajo. Sin embargo, frente a malas críticas como la de su amigo el pintor Anthon Gerard Alexander van Rappard (1858-1892), al que había conocido en 1881 , que le escribe en una carta «Estarás de acuerdo conmigo en que este trabajo no se puede tomar seriamente, Por fortuna eres capaz de mucho más. Pero, ¿por qué todo lo observas y lo tratas superficialmente, de la misma manera? ¿por qué no estudias minuciosamente los movimientos?» y concluye «El arte es demasiado elevado para poderlo tratar con tanta negligencia», también hay otros comentarios elogiosos como los del pintor francés Émile Bernard (1868-1941) que escribe sobre «Comedores de patatas» «Me quedé desconcertado, en esta confusión, por la comida de los pobres en una barraca inquietante bajo una mísera luz. Era grandioso en su fealdad y estaba lleno de una vida inquietante» Ya en esta época Vincent se plantea abandonar los colores oscuros que hasta aquel momento habían caracterizado su pintura por otros más luminosos siguiendo los consejos de su hermano Theo al que escribe «expresar la luz por oposición a la obscuridad. Ya sé todo lo que piensas del «demasiado negro», pero, sin embargo, no estoy aún absolutamente convencido».

BREVE ANÁLISIS DEL CUADRO «LOS  COMEDORES DE PATATAS»

Es un breve vídeo de cinco minutos donde analiza esta obra que es la más importante de su primera etapa

En el mes de noviembre de 1885 abandona Nuenen y se dirige a Amberes para vivir en su barrio portuario. A comienzos de 1886 se matricula en la Academia de Bellas Artes de la ciudad pero no termina de encajar en su ambiente ni es apreciado por sus profesores que incluso le quieren poner en la clase de principiantes con jóvenes de quince años. Harto de esta situación Vincent coge sus escasas pertenencias y toma un tren con destino a París para irse a vivir con su hermano Theo. Poco antes de este viaje escribía en febrero de ese año de 1886 a su hermano Theo que apenas conseguía lo suficiente para poder comer de vez en cuando. Tampoco su estado físico es muy bueno debido a la sífilis que padece y que le había hecho perder la mayor parte de su dentadura. Theo trabajaba en París como marchante en la Galeria Goupil y Cía y conocía gracias a su profesión a algunas de las personalidades artísticas más importantes de París, entre las que se encontraban Toulouse Lautrec (1864-1901), Camille Pisarro(1830-1903), Paul Gaugin (1848-1903), Paul Cézanne (1839-1906), el propio Émile Bernard al que ya he citado antes y en general toda la pléyade de grandes pintores que entonces se concentraban en la que era, sin duda, el principal centro cultural de Europa.

De esta forma Vincent entra en contacto directo con el impresionismo, con sus brillantes colores y luminosidad que va incorporando a sus propias obras. También en esta época se despierta su entusiasmo por el arte japonés , entusiasmo compartido por otros pintores impresionistas . El propio Vincent escribe sobre este arte «Envidio a los japoneses por la increíble claridad de la que están impregnados todos sus trabajos. Nunca resultan aburridos ni hacen el efecto de haberlos realizado deprisa… Su estilo es tan sencillo como respirar. Son capaces de hacer una figura con solo unos pocos trazos seguros, que hace que parezca tan fácil como abrocharse el chaleco» También en esta época comienza a utilizar algo que sería característico de la nueva etapa en la pintura de Vincent, el uso de un intenso y brillante amarillo que encontraremos en obras tan célebres como «Los girasoles». Pero la vida en París, de constantes juergas con otros artistas, el abuso del alcohol y los efectos de la persistente sífilis minaban poco a poco su salud y además el ambiente de la ciudad que tan excitante le había parecido a su llegada ahora le causaba agobio. De nuevo había llegado el momento de partir.

«El puente en la lluvia» pintado por Vincent Van Gogh en 1887 copia de una obra del pintor japonés  Utagawa Hiroshige (1797-1858). Vincent admiraba la pintura japonesa y escribía a su hermano que contemplarlas le hacía sentirse «mucho más alegre y feliz»  sin duda por su brillante colorido en comparación con la oscuridad de sus primeras obras como acabamos de ver en «Los comedores de patatas»  y afirmaba que  «Todas mis obras están basadas en algo del arte japonés.» Cuando en 1888 llega a Arlés se sentirá feliz porque le parece estar en Japón, y así se lo escribe a su hermano Theo «Por mi parte no necesito las imágenes japonesas aquí, todo el tiempo me digo a mí mismo que aquí yo estoy en Japón» (imagen y citas procedentes de http://www.uchina.com.ar )

En febrero de 1888 Vincent deja la casa de su hermano en París y siguiendo los consejos de Toulouse Lautrec se dirige hacia el sur de Francia y se establece en Arlés . Nace en su mente la idea de crear allí una especie de refugio para artistas y parece que por fin recupera la serenidad perdida, aunque acusa la soledad al no hablar el dialecto utilizado en Arlés . Esta incomunicación le hará centrarse en su trabajo y comienza la etapa más productiva de su vida , pintando al aire libre y todo aquello que ve , usando verdes, azules y amarillos de gran intensidad . Escribe «Aquí no me hace falta para nada el arte japonés, porque me imagino estar en el Japón y nada más necesito abrir los ojos y ver lo que tengo delante», entre las obras de estos primeros meses en Arlés destaca «El puente de Langlois.», «El peral en flor» o «El melocotonero» cuyos títulos muestran cual era el interés principal de Vincent, la naturaleza, los cultivos, las flores, los árboles frutales, todo aquello que se ofrecía a sus ojos y que le deslumbraba por su luz y colorido. En el terreno afectivo Vincent ya no volvería a mantener una relación estable y su contacto con las mujeres se limita a sus frecuentes visitas a los burdeles de la región.

«El melocotonero» pintado en la primavera de 1888, uno de una serie de cuadros dedicados a árboles frutales durante la primavera. El color y la luz del cuadro es característico del impresionismo que comenzaba a adoptar Van Gogh, mientras que el gusto por los temas florales y decorativos procede de la influencia que sobre él tenía la pintura japonesas, como ya hemos visto  (imagen procedente de http://www.allposters.com ) 
Durante el verano de ese año comienza a retratar a las gentes del pueblo e inicia una amistad con el cartero Joseph Roulin , al que retratará y también a la familia de éste en numerosos cuadros de esta época a la que pertenecen obras como El campesino, Retrato de Patience Escalier, El zuau, El lugarteniente Millet y El cartero Roulin aunque la obra más importante de esta época es «La terraza de un café en la Plaza del Foro durante la noche» . Pero entre esta incesante actividad Vincent encuentra el tiempo suficiente para insistir a su amigo Paul Gaugin para que acuda a Arlés y le ayude a montar el refugio de artistas que soñaba crear desde su llegada allí. En el mes de mayo Vincent había alquilado   una casa que le había llamado la atención por el color amarillo de su fachada   Cuando este le anuncia que se dirige allí Vincent se entusiasma , prepara con esmero la habitación que ocupará su amigo y la decora pintando en sus paredes girasoles y naturalezas muertas. Su hermano Theo, una vez más, le había enviado el dinero necesario para acondicionar su querida casa amarilla para convertirla en su soñado estudio para artistas al que pensaba llamar «L´atelier du Midi» . Vincent había invitado a otros artistas pero Gaugin era el único que había respondido ante la insistencia de Theo.

«La terraza de un café en la Plaza del Foro durante la noche» Ya en esta época comienza a utilizar intensos colores verdes, amarillos y azules que iban a dominar su obra durante los últimos años de su vida . Esta realizada en Arlés en septiembre de 1888  , representa a un café que había en el pueblo que se llamaba Cafe Terrace y que años después, en honor del pintor, cambiaría su nombre por el de Café Van Gogh. Es la primera de sus obras donde utiliza un cielo estrellado para dar una mayor luminosidad y alegría a la composición  (imagen procedente de http://futuroshechos.blogspot.com )
Gaugin, que había trabajado como agente de bolsa antes de dedicarse a la pintura, era un hombre de carácter difícil, arrogante pero muy consciente del valor artístico de su obra, justo lo opuesto a Vincent, siembre inseguro sobre el auténtico valor de lo que hacía aunque una vez escribiera «yo no tengo la culpa de que mis cuadros no se vendan. Pero llegará el día en que la gente se dé cuenta de que tienen más valor de lo que cuestan las pinturas» Aunque estaba lejos de imaginar las cifras astronómicas que se pagaría durante el último tercio del siglo XX por sus cuadros. Antes de la llegada de Gaugin , Vincent había escogido los girasoles como protagonistas de sus cuadros a los que dedicaría cuatro cuadros en el mes de agosto de 1888, variando el número de girasoles en cada uno de ellos, desde los tres girasoles, pasando después a cinco, doce y quince girasoles en los que iba variando el fondo de la pintura. Cuando Gaugin llega allí el 21 de octubre espera establecer una relación con Vincent como la de un maestro con su alumno, y durante las primeras semanas Vincent le sigue a todas partes casi como haría un niño. Gaugin le anima a que pinten juntos diferentes partes  históricas de Arlés.

«Jarrón con doce girasoles» pintado en agosto de 1888 y actualmente conservado en la Neue Pinakothek de Munich, es uno de la serie de cuadros pintados por Van Gogh en agosto de 1888 con los girasoles como protagonistas y donde emplea toda la gama cromática del amarillo, un color que le atraía particularmente y hasta su casa de Arlés era de este color . Uno de estos cuadros de girasoles lo utilizaría para decorar la habitación de su amigo, el pintor Gaugin , cuando supo que iría a visitarle en el mes de octubre de ese año 1888 . En 1987 se pagaría por una de estas obras titulada «Jarrón con quince girasoles » casi cuarenta millones de dólares, aunque sería ampliamente superado dentro de la obra de Van Gogh por «Retrato del doctor Gachet» por el que se llegó a pagar 82.500.000 dólares , lo que no está nada mal para un artista que sólo consiguió vender una de sus obras por cuatrocientos francos (imagen procedente de http://es.wikipedia.org )   
Sin embargo , el carácter de Vincent no estaba hecho para ser sumiso durante mucho tiempo y actuar como un alumno ante su maestro, y pronto comenzarán las discusiones y los enfrentamientos ante las diferentes formas de ver el arte que ambos mantienen. La situación llega a un punto de no retorno la noche del 23 de diciembre de 1888 . Sobre lo que pasó entonces hay diferentes versiones, ya que Vincent nunca habló de ello en sus cartas y la versión que tenemos de Gaugin debe ser mirado con precaución ya que él estaba implicado directamente en este hecho. Me remito a las palabras de Juan Antonio Cebrián en su obra «Pasajes de la historia», que relata así lo que pudo haber sucedido «Gaugin le dice a Van Gogh que piensa regresar a París; entonces , Vincent, en un arranque de rabia inusitado, empuña una navaja de afeitar intentando agredir a un templado Gaugin, que se limita a mirar fijamente al embrutecido Vincent; esto es suficiente para que Vincent, destrozado por lo que había estado a punto de cometer, corte de un tajo el lóbulo de su oreja derecha;era su forma de pedir perdón por el demonio que le ahogaba por dentro» Como veis se cortó nada más que el lóbulo y no la oreja entera, Cebrián dice la derecha en otros libros dicen que es la izquierda, como nos ha dado a conocer el cine en algunas de sus versiones sobre este hecho.

«Autorretrato con oreja vendada» realizado por Van Gogh después de autolesionarse el 23 de diciembre de 1888. Se conservan más de una veintena de autorretratos del pintor pero más por su dificultar por conseguir modelos que por narcisismo de Vincent. Apenas unas semanas después de pintar esta obra sería de nuevo internado en el hospital aquejado de manía persecutoria.Su equilibrio mental  después del episodio de la oreja sería cada vez más débil . Un detalle que hasta ahora no os había indicado es que debido a los enfrentamientos que mantuvo con su padre y a lo que él consideraba una infancia y adolescencia desgraciada firmaba todos sus cuadros sólo con su nombre, Vincent, y no con el apellido (imagen procedente de http://www.theartwolf.com)
Pero no acaba aquí la truculenta escena pues «con la oreja ensangrentada , lleva la parte seccionada a un prostíbulo que él frecuentaba para que Rachel, su favorita, cuide de aquel trozo» La versión de Gaugin era que el propio Vincent se había autolesionado después de enterarse de la noticia del matrimonio de su hermano con Johana Gesina Bonger (1862-1925) . Sea como fuere la mañana del 24 de diciembre el comisario de policía de Arlés halló a Vincent en la cama de su casa con la oreja ensangrentada y el lóbulo seccionado. Fue traslado al  hospital Hôtel-Dieu  de Arlés mientras que Gaugin se alejaba de allí y no volvería a ver nunca más a Vincent. Al regresar a casa, Van Gogh pintaría su «Autorretrato con oreja vendada» . Su equilibrio mental está muy afectado , sufre de manías persecutorias, piensa que le quieren envenenar por lo que vuelve a ser ingresado. De nuevo en Arlés su comportamiento hace que los vecinos del pueblo soliciten que sea llevado de nuevo al hospital porque le tienen miedo y temen que pueda hacer daño a alguien o a sí mismo. El propio Vincent, dándose cuenta de su estado mental, solicita voluntariamente ser ingresado en un centro psiquíatrico tanto por su tranquilidad como por la de todos aquellos que le rodean.

La maravillosa y conmovedora en su belleza «Noche estrellada sobre el Ródano» Dicen que cuando pintaba llegaba en ocasiones a llorar por la emoción que sentía en el momento de la creación y cuand contemplas obras como esta puedes llegar a sentir esa emoción y para eso no es necesario saber de arte, basta con dejarnos arrastrar por la belleza de su color con la que Vincent nos habla a través del tiempo, compartiendo ese corazón cálido que en vida nadie quiso explorar. Lo pintó en 1888 antes de la llegada de Gaugin, una época esperanzada en la vida de Vincent y las estrellas que pueblan el cielo de esta obra serían el símbolo de las ilusiones que ponía en el futuro. Cuando sabes algo más de la vida de un artista es más sencillo entender y , sobre todo, dejarse cautivar por su obra . Esta obra sería expuesta en 1889 en el Salón de los Independientes de París  (imagen procedente de http://observatorio.info)

En abril se casa Theo y se ocupa de que Vincent sea trasladado a la institución psiquiátrica  de Saint Paul, en la localidad de Saint Rémy de Provence a unos treinta kilómetros de Árles, ingresando allí el 4 de mayo de 1889. Sin embargo, a pesar de haber pasado esos meses entre episodios de locura´y constantes ataques epilépticos ,Vincent no sólo no había dejado de pintar sino que envía a su hermano dos cajas llenas de cuadros que se encuentran entre lo mejor de su obra. Durante su estancia en Saint Paul sigue pintando de manera obsesiva todo lo que ve , como los lirios . Luego realiza una serie de pinturas donde los protagonistas son los olivos, los pinos  y los cipreses. Pero de nuevo tiene que detener su trabajo cuando se repiten sus ataques en los que llega a comerse la pintura de los tubos que empleaba en sus cuadros, pinturas que además usaban plomo, mercurio y arsénico que pudieron contribuir a un empeoramiento de su enfermedad mental. Será dos de las obras realizadas durante esta época «La noche estrellada sobre el Ródano» e «Iris» las que se expondrán en el Salón de los Independientes entre los meses de mayo y octubre. Este Salón , que había nacido en 1884, era el escaparate de las nuevas corrientes artísticas que iban a dominar el final del siglo XIX y comienzos del XX.

«La viña roja» pintada por Vincent en 1888 y adquirida por la pintora belga Anna Boch en 1890 por cuatrocientos francos en la exposición de Bruselas del grupo Les XX . Sería la única obra que vendió en vida y que actualmente se conserva en el Museo Puskhin de Moscú. Por una carta que Vincent escribió a Theo se cree que también pudo haber vendido un autorretrato  (imagen procedente de http://www.insht.es )

También a finales de 1889 recibe una invitación de un grupo de artistas belgas conocidos como «Les XX» para participar con seis de sus obras en la exposición que están preparando en Bruselas. Será en esta exposición cuando Vincent venda su único cuadro en vida del que se tiene noticia, «La viña roja», que es adquirido por cuatrocientos francos por la pintora belga Anna Boch(1848-1936), que quería apoyar a los pintores jóvenes o desconocidos y admiraba el talento de Van Gogh , que además era amigo de su hermano Eugène Boch. Este mismo mes , el 31 de enero, el hermano de Vincent, Theo, tiene a su primer hijo al que pone de nombre Vincent Willem en honor al hermano de Theo.Vincent comunica a su hermano su deseo de abandonar el sanatorio de Saint Remy de Provence . Su hermano le convence para que sea tratado por un doctor amigo suyo y de otros pintores de París, Paul Ferdinand Gachet(1828-1909) que tenía una clínica en Auverse-sur -Oise y se ofrecía a atenderle. Vincent acepta y se instala en Auverse-sur-Oise el 20 de mayo de 1890. Ya bajo los cuidados del doctor Gachet, él mismo pintor aficionado, Vincent tendrá una nueva etapa de producción frenética, pintando setenta y nueve cuadros, treinta y cinco dibujos y un aguafuerte con la imagen del doctor Gachet en apenas setenta días.

«Retrato del doctor Gachet» de 1890. El doctor cuidaría a Vincent durante sus últimos meses de vida, en los meses en los que Vincent tuvo una actividad más frenética, realizando hasta setenta y nueve cuadros. Sobre este retrato Vincent escribe a su hermano «He hecho un retrato de M. Gachet con una expresión melancólica, que bien podría parecer una mueca a aquellos que lo vean.Triste pero amable, y aún así clara e inteligente, así es como muchos retratos deberían hacerse. Hay cabezas modernas que podrían mirarse durante mucho tiempo, y que se volverán a ver, quizás, con nostalgia, cien años después.» Una nostalgia que hoy sentimos al contemplar este cuadro realizado apenas un mes antes de su muerte . Esta es la primera versión  por la que se pagarían ochenta y dos millones de dólares . Hay una segunda versión echa con unos días de diferencia que se conserva en el Museo de Orsay de París. Sobre la mirada del doctor escribiría Vincent a Gaugin, con el que aún se escribía,  que era «la expresión desencantada de nuestro tiempo» (imagen procedente de http://es.wikipedia.org )

Sin embargo, Vincent no confiaba mucho en la capacidad del doctor para tratarle, ya que escribió a su hermano Theo «esta más enfermo que yo «  aunque probablemente tampoco hizo nada por seguir sus consejos, pues ese era su comportamiento habitual, incapaz de someterse a ninguna norma. En esta carta dirigida a su madre muestra como se encuentra completamente absorbido por la pintura y por los paisajes de Auverse «Estoy plenamente absorbido por estas llanuras inmensas de campos de trigo sobre un fondo de colinas, vastos como el mar, de un amarillo muy tierno, un verde muy pálido, de un malva muy dulce, con una parte de tierra labrada, todo junto con plantaciones de patatas en flor; todo bajo un cielo azul con tonos blancos, rosas y violetas. Me siento muy tranquilo, casi demasiado calmado, me siento capaz de pintar todo esto» En el mes de julio viaja a París para visitar a Theo, a su esposa y al pequeño Vincent. No puede ocultar su orgullo porque el primogénito de su hermano lleve su nombre, pero también se marcha entristecido porque su hermano tiene dificultades económicas y él se siente como una carga para la familia.

«Cuervos sobre un campo de trigo» . La última obra que pintó Vincent Van Gogh aquel 27 de julio de 1890. Después de terminarla disparó contra su abdomen. No moriría hasta dos días después pero la herida era mortal. Los cuervos en pintura son aves proféticas, símbolo de una muerte próxima . Dicen que aquel día Vincent había pedido una pistola para espantar a las aves del campo de trigo que quería retratar. Al terminar se disparó. Los expertos en pintura dicen que los tres caminos que se pueden apreciar en la pintura eran las tres salidas a su situación que Vincent veía en su mente. Si es así, no sabemos que significaban los otros dos caminos pero eligió el de la muerte, quizás para él el de la liberación . Para todos la pérdida de un gran artista y de un hombre incomprendido. Pero como suele decirse, Vincent Van Gogh sigue con nosotros , a través de sus cuadros y después de conocer un poco más de su vida al menos yo no podré contemplarlos sin sentirme más cerca de aquel que llamaban «el loco del pelo rojo» (imagen procedente de http://arte.observatorio.info ) 

De regreso a Auverse, el 27 de julio Vincent da las últimas pinceladas a un cuadro titulado «Campo de trigo con cuervos». No sabemos que sucedió, aunque la mayoría de las versiones sostienen que Vincent se disparó un tiro en el abdomen, quizás pretendía aliviar a su hermano de la carga que él representaba, pero no es más que una especulación. Minutos después fue a la pensión Ravoux donde se había alojado desde su llegada a Auverse y subió a su habitación sin decir nada a nadie. Así nos relata la escena Juan Antonio Cebrián «los clientes contemplaron con sorpresa los movimientos de Vincent. Éste descansó unos instantes sobre la mesa de billar que se encontraba en el centro  de la sala; más tarde , subió a trompicones los diecisiete escalones que lo separaban de su cama; cuando llegó a ésta, se desplomó sobre ella sin musitar ningún lamento. Algunos hombres que lo habían seguido lanzaron de inmediato la voz de alarma» Sería el doctor Gachet quién acudiera junto al lecho de Vincent sólo para comprobar que la herida era mortal. Escribió a Theo que apenas tuvo tiempo de llegar para ver morir a su hermano . Vincent agonizó durante dos días y murió en la  madrugada del 29 de julio de 1890. En diez años había pintado 841 cuadros y 1600 dibujos, aunque sólo había vendido uno de ellos. Su amado hermano Theo, que siempre había cuidado de él, agotado por el trabajo, por la sífilis que padecía y hundido por la muerte de su hermano moriría apenas seis meses después en un hospital de Utrecht, el 25 de enero de 1891.

Las tumbas de los dos hermanos Van Gogh, Vincent y Theodore, que estuvieron unidos en vida y hoy sus tumbas les mantienen unidos aunque sólo sea para los que las contemplamos y para aquellos amantes del arte, de la belleza, de aquello que hace más hermosas nuestras vidas y que debemos a grandes artistas como Vincent Van Gogh. Cuando Vincent murió el doctor Paul Gachet puso uno de los amados girasoles que Vincent había pintado en tantas ocasiones sobre el vientre herido del pintor mientras Theo sujetaba entre sus brazos el cuerpo del hermano al que tanto amaba. Quizás no recibió en vida el cariño que habría necesitado para salvarse de su enfermedad mental, pero si hay otra vida hoy recibirá el cariño de todos aquellos que nos emocionamos al contemplar sus cuadros. Gracias por crear belleza (imagen procedente de http://www.aloj.us.es )

Y aquí termino el relato de la vida de este hombre atormentado, que nunca conoció la paz más que en unos pocos  instantes de su vida, que no halló el reposo del amor correspondido ni el reconocimiento de su obra que llegaría demasiado tarde ya en el siglo XX. Hoy podemos disfrutar de su obra en los museos y espero que los que lean este artículo , que no es más que una síntesis de diferentes lecturas, os sirva, sino para conocer mejor su obra en lo que yo no tengo suficientes conocimientos para explicarla mejor, si para comprender algo más del ser humano que se asoma en estas obras, que plasmó en ella sus angustias, sus pasiones, sus miedos y , sobre todo , su amor a la belleza , al arte y a la vida, aunque esta nunca fue demasiado generosa con él. Quiero cerrar esta historia con una frase que ya cité en la primera parte y que creo que concentra en ella lo que fue la vida de Vincent Van Gogh, uno de los mejores pintores de la historia  «Se puede tener, en lo más profundo del alma, un corazón cálido, y sin embargo, puede ser que nadie acuda a él.» Hoy, cada vez que nos acercamos a sus obras es como si nos aproximásemos a ese cálido corazón

PROGRAMA  DE JUAN ANTONIO CEBRIÁN SOBRE LA VIDA DE VINCENT VAN GOGH

No es un vídeo al uso, no se trata de un documental , sino de un relato radiofónico sobre la vida de Vincent Van Gogh. Mientras Juan Antonio Cebrián, un divulgador con el que algunos como yo aprendimos a amar la historia, relata la vida de Van Gogh se suceden las obras del pintor. Creo que os puede interesar e incluso emocionar. Ojalá que estos artículos os haya despertado más curiosidad por la obra de Van Gogh y acudáis a fuentes más autorizadas que la mía, pero para amar la pintura , para amar el arte, es suficiente con dejarse cautivar por él. Y Van Gogh lo consigue.  

VINCENT VAN GOGH , EL BUSCADOR DE BELLEZA (PRIMERA PARTE)

No es posible desligar la obra de un artista de su vida, de su personalidad, de las vicisitudes que han marcado su existencia, que han influido en su pensamiento, en la manera de sentir y de enfrentarse al mundo . La pregunta sería ¿qué es ser un artista?¿qué significa ser escultor, escritor, pintor, actor, fotógrafo o cualquier otra actividad en la que el ser humano interpreta a través de su talento artístico la realidad?Un artista es igual que cualquier otro ser humano con la diferencia de estar dotado de ese talento natural que le permite mostrar a los demás lo que siente y como ve el mundo a través de su mirada, aliviando así la angustia de existir que todos , en algún momento de la vida, llegamos a sentir. Pero hay una frase que me parece la más acertada para definir al artista de cualquier época, ya sea hombre o mujer, y es la del escritor mexicano Doménico Cieri Estrada(1954) que dice «El artista es siempre un perseguidor de la belleza.» Por encima de cualquier otra cosa el artista persigue la belleza, la busca y la llega a encontrar incluso en lugares, personas y momentos donde los demás no veríamos más que horror, fealdad o indiferencia. Los espíritus más sensibles son los que más anhelan esta belleza y también los que más se torturan por su ausencia.
Entre esos espíritus sensibles casi hasta la enfermedad, entre los búscadores insatisfechos de la inaprensible belleza, se encuentra uno de los pintores más atormentados de la historia del arte, el protagonista de nuestra historia de hoy, el pintor holandés Vincent Van Gogh (1853-1890)  cuya compleja personalidad se refleja en esta frase en la que él mismo se definía «Suelo ser una persona espantosa, propensa a la melancolía y al mal humor, tengo hambre y sed de simpatía , pero si no la encuentro me trae sin cuidado e incluso echo más leña al fuego». Pero no nos adelantemos en nuestro relato y viajemos ahora al pasado , al 30 de marzo de 1853 , a un pequeño pueblo del Bravante septentrional , en territorio de los Países Bajos a unos 80 kilómetros de Breda, la ciudad popularizada por el cuadro del pintor español Diego Velázquez(1599-1660)  «La rendición de Breda», llamado Groot-Zundert. Como si el destino quisiera marcarle desde el mismo momento de su nacimiento, su llegada al mundo no estuvo rodeada por la alegría natural en unos padres que tienen a su primer hijo. El matrimonio entre el pastor protestante Théodorus Van Gogh(1822-1885) y Anne Corneélie (1819-1907) había tenido un hijo antes que el pequeño Van Gogh que, por desgracia , había muerto justo un año antes del nacimiento de Vincent y el dolor por la muerte de este niño seguía vivo en sus padres que decidierón poner a su segundio hijo  el mismo nombre del fallecido , Vincent.

Théodorus Van Gogh, pastor protestante y hombre de carácter rígido y frío que no tenía demostraciones de cariño hacia sus hijos, mostrando un comportamiento distante, lo que no impedía que Van Gogh quisiera agradarle e incluso le tomase como modelo inspirador para continuar el camino de la religión de su padre. Según relata el escritor y periodista español Juan Antonio Cebrián(1965-2007) en su obra «Pasajes de la historia», que junto a «Vidas secretas de grandes artistas» de la periodista y escritora Elizabeth Lunday me guiarán a lo largo de este relato, «la frase más cariñosa que le dedicó (a su hijo Vincent Van Gogh) en su vida fueron parecidas a las de «¡Me vas a matar!» o «¡eres un perro inmundo». (imagen procedente de http://www.aloj.us.es )
Aunque Anne ya era mayor en el momento de tener a Vincent, pues en 1853 tenía  34 años,una edad madura en aquel tiempo, en los siguientes años seguiría ampliándose la familia con el nacimiento de  Anne-Cornélie  en 1855 a la que le seguiría el primero de los hermanos de Vincent, Théo en 1857 , con el que el  Vincent estaría toda la vida muy unido. Dos años después nace la segunda de sus hermanas, Elisabeth-Huberte y en 1862 lo hacía su  hermana Guillaumette Jacoba , con la que también mantendría una relación muy próxima durante toda su vida , ambos con mentes torturadas al borde de la enfermedad mental. Por último, en 1867 nace el último de los seis hermanos , Corneille-Vincent. La vida en la familia Van Gogh estaba marcada por la austera y estricta religiosidad de su padre Theodorus que era pastor de la iglesia calvinista ,una corriente reformista de la Iglesia surgida en el siglo XVI y cuyo principal impulsor había sido el teólogo francés Juan Calvino (1509-1564). Permitidme que os diga brevemente algo sobre el calvinismo, porque la religión siempre tendría un peso muy importante en la vida de Vincent  e incluso trataría seguir los pasos de su padre.

Anne- Cornélis Carbentus. Nacida  en 1819 se casó con Théodorus Van Gogh en 1851. Un año después tendría a su primer hijo al que pusieron de nombre Vincent y murió al poco de nacer. En 1853 daba a luz de nuevo, en este caso al futuro pintor Vincent Van Gogh  al que pusieron su nombre en recuerdo del hermano muerto , una muerte de la que aún no se habían recuperado. Ella era una mujer sumisa que aceptaba sin alzar la voz las rígidas normas del padre de Vincent. Tal vez fuera ella la que enseñara esta frase a Vincent Van Gogh que él dejaría por escrito » Sufrir sin quejarse es la única lección que debemos aprender en esta vida.» Pero el joven Vincent tenía una personalidad demasiado fuerte para vivir siempre sin quejarse ni alzar la voz (imagen procedente de http://www.aloj.us.es )
Juan Calvino había expuesto en su obra «La institución de la religión cristiana»  una doctrina religiosa  basada en la idea de la predestinación, es decir, cada hombre está designado desde su nacimiento a ser salvado o condenado. La salvación se consigue por la fe y no por las obras, a través del conocimiento de Dios y de nosotros mismos , un conocimiento que se adquiere con la lectura de la Biblia . Pero sólo aquellos que la voluntad divina quiera salvar lo lograrán . El calvinismo niega los sacramentos excepto el del bautismo , rechazaba al Papa y a la jerarquía eclesiástica y consideraba la  riqueza como una señal de estar predestinado para la salvación. Desde su origen trató de conciliar el poder político y espiritual , regulando tanto la vida eclesiástica como la economía y la vida privada y concibe al ser humano como malo por naturaleza y sólo la voluntad de Dios puede salvarle.  Este era la fe que gobernaba la casa de los Van Gogh y que determinaba los actos de su vida bajo la estricta vigilancia de Théodorus Van Gogh . No sabemos que efectos tendría este ambiente en una mente tan sensible como la de Vincent pero ,si tenemos en cuenta el destino de alguno de sus hermanos, este ambiente no era beneficioso para ellos.

Anne-Cornélie Van Gogh (1855-1930) la mayor de los hermanos Van Gogh después de Vincent. No tuvo los problemas de desequilibrios psicológicos ni ataques de epilepsia  como tuvieron otros de sus hermanos. Dedicó su vida a la enseñanza y se estableció en Inglaterra enseñando francés. (imagen procedente de http://www.aloj.us.es )
Mientras que la mayor de sus hermanas, Anne-Cornélie Van Gogh(1855-1930)  se dedicaría a la enseñanza trabajando como maestra en Inglaterra durante gran parte de su vida y Elisabeth Hubert Van Gogh(1859-1936) , considerada por Vincent una mujer de gran inteligencia, se dedicaría a la literatura escribiendo en 1910 una obra dedicada a su hermano titulada «Recuerdos personales de Van Gogh» , el resto de hermanos tendrían vidas menos felices. Su hermana preferida, Guillaumette Jacoba van Gogh(1862-1941) también se dedicaría a la pintura y fue una destacada defensora de los derechos de la mujer en los Países Bajos, pero durante los últimos cincuenta años de su vida permanecería internada en un sanatorio psiquiátrico. El hermano pequeño, Corneille-Vincent Van Gogh(1867-1900), tendría un matrimonio desgraciado tras lo cual decidió alistarse en el ejército que participaba en la Segunda Guerra Anglo- Bóer que enfrentaría a ingleses y bóers, nombre que se daba a los colonos de origen holandés ,  en Sudáfrica entre 1899 y 1902. En el transcurso de la guerra Corneille se suicidaría en 1900, aunque en algunas referencias he encontrado que pudo morir en combate. En cuanto al hermano que siempre estaría a su lado, Théodorus Van Gogh, se convertiría en un marchante de arte con éxito y trataría de promover la obra de su hermano al tiempo que le cuidaba y no dudaba en acudir a su lado cuando le necesitaba. Gran parte de lo que sabemos sobre Vincent lo debemos a las ochocientas cartas que se conservan de ellos y , como veremos más adelante, también sufriría un colapso mental en los últimos meses de su vida.

Fotografía  a los trece años de edad de Théodorus Van Gogh(1857-1891), el primero de los hermanos varones de Vincent y con el que más unido estaría hasta su muerte , escribiéndose entre ambos más de ochocientas cartas que se conservan y fueron publicadas bajo el título de «Cartas a Théo» que recoge la correspondencia mantenida desde 1872 hasta el año de la muerte de Vincent en 1890. Al contrario que su hermano mayor, Theo si supo formar una familia y desarrollar una solida carrera profesional como marchante de arte, desde la que intentó comercializar, sin mucho éxito, la obra de su hermano. Siempre estuvo dispuesto a ayudarle  y la muerte de Vincent fue un golpe del que ya no se recuperaría (imagen procedente de http://www.aloj.us.es )
Los episodios de epilepsia, esquizofrenia y otras dolencias mentales padecidas por diferentes miembros la familia Van Gogh eran vistas a través del filtro de su fe calvinista como resultado de la voluntad de Dios y nada se podía hacer por evitarlas, era la predestinación de la familia y sólo Dios podía librarles de ella como sólo Dios podía conceder la salvación de sus almas. Visto desde mi óptica personal y con todo el respeto que me merecen todos los credos religiosos, encuentro que es una creencia que adolece de falta de esperanza y , por lo tanto, de alegría, ya que no es la bondad de las personas la que les salva, sino la decisión de Dios, y si la pobreza o las enfermedades son voluntad de Dios en ese caso no merece la pena luchar contra ellas. Pero mejor será dejar el siempre espinoso  tema de la fe religiosa, para volver al lado del pequeño Vincent. En 1862 comienza a manifestar sus primeras inquietudes artísticas realizando algunos dibujos pero en su familia no había antecedentes de artistas, por lo que estos primeros dibujos no llamaron la atención de nadie. En 1864 inicia un periplo por diversos internados, pues sus padres le cambiarían con frecuencia de lugar de estudios, a pesar de lo cual aprenderá francés e inglés y  mostrará una inclinación natural por el dibujo y las ciencias naturales, aunque sin destacar demasiado en ninguna materia.

File:Vincent van Gogh 1866.jpg
Fotografía de Vincent Van Gogh en 1866 a los trece años de edad. Escribe Juan Antonio Cebrián sobre sus años de escuela «Lo cierto es que Van Gogh no fue un buen alumno, pues se pasaba horas enteras con la mirada perdida en el paisaje, acaso intuyendo lo que años más tarde iba a suceder»  Ni su infancia ni la adolescencia fueron etapas felices para Vincent y el mismo diría años después «Mi juventud fue triste, fría y estéril» A los quince años, sin que sepamos con certeza el motivo, abandonaría los estudios , quizás para cumplir lo que él mismo decía en una de sus frases que han llegado hasta nosotros  «¿Qué sería de la vida, si no tuviéramos el valor de intentar algo nuevo?» Junto a su tío Vincent Van Gogh (1802-1888) comenzaba una nueva etapa de su vida trabajando en la a partir de 1869 en la galería de Arte propiedad de su tío (imagen procedente de http://es.wikipedia.org )

En 1868 se interrumpen sus estudios de forma definitiva, con apenas quince años de edad, sin que exista una causa clara, tal vez los primeros episodios de epilepsia, una dolencia que le acompañaría el resto de su vida , o tal vez fue su decisión de no seguir estudiando pero lo cierto es que al año siguiente 1869, comienza a trabajar en la galería de arte Goupil y Cía en la ciudad de La Haya, que era propiedad de su tío y hermano de su padre, Vincent Van Gogh (1820-1888),ya veis que no eran muy originales con los nombres,  donde Vincent entrará por vez primera en contacto con el mundo de la pintura, los artistas y los críticos y todo lo que rodea al mercado del arte. Durante los siguientes cuatro años, hasta 1873 , combinará su trabajo en la Galería de arte con sus visitas a los muesos y exposiciones de pintura en La Haya. Fue una época feliz para Van Gogh, que si años más tarde definió sus años infantiles como una época «triste, fría y estéril» , escribirá sobre su estancia en la Galería de arte que «Es un negocio maravilloso. Cuanto más tiempo se trabaja en él más ambicioso se vuelve uno.» Permanecerá en La Haya hasta el año 1873, mientras su familia se traslada a la localidad de Helvoirt, donde su padre ha sido designado pastor, mientras que su querido hermano Théo comienza sus estudios en Oisterwijk y también se inicia en 1872 una correspondencia entre ambos que no se detendrá hasta la muerte de Vincent.

Elisabeth-Huberte Van Gogh(1859-1936) que en opinión de Van Gogh era la más bella e inteligente de sus hermanas y no entendía muy bien como se había casado con un hombre de leyes, pues ella era una mujer de temperamento artístico e inclinada a la literatura. Ella escribiría en 1910 el libro «Recuerdos personales de Van Gogh» en homenaje a su hermano (imagen procedente de http://www.aloj.us.es )

Viendo su entusiasmo por el mundo del mercado del arte su tío decide enviarle en 1873 a la sucursal de la galería en Londres mientras que su hermano Theo se incorporará a la empresa un año después pero en la sucursal de Bruselas. Pero lo que parecía que era un paso en la carrera de Vincent como marchante de arte no sería así. En Londres encontraría el amor cuando conoció a Úrsula, la hija de la dueña de la pensión donde se había alojado. Por desgracia para Vincent, ella ya estaba comprometida y rechazó al joven que hirió al joven y comenzó a descuidar su trabajo y a perder interés por el mercado del arte, que no por el arte. En una carta escrita a su hermano Theo en enero de 1874 le habla de todos los pintores que le gustan  y le dice «Con cuánto gusto hablaría todavía de arte contigo, pero no tenemos más que escribirnos con frecuencia; encuentra bello todo lo que puedas; la mayoría no encuentra nada suficientemente bello.» La búsqueda de la belleza sería una de las banderas que seguiría Vincent durante toda su vida. Al mismo tiempo que sufre su primer desengaño amoroso y que pierde interés por su trabajo se aviva su atracción por la religión y en particular por el movimiento evangelista muy en boga en esta época en Inglaterra.

Fotografía de Guillaumette Jacoba Van Gogh (1862-1941) que después de Theo era su hermana favorita. Una mujer que destacó en la lucha por los derechos de la mujer en Holanda  pero pasaría los últimos cincuenta años de su vida recluida en un centro psiquiátrico convertida en la última superviviente de los hermanos Van Gogh (imagen procedente de http://aloj.us.es )

Su tío decide trasladarle a la sucursal de París en 1875 con la esperanza de que al hallarse en una nueva ciudad olvide su obsesión por la religión y recupere su interés por el mundo de los negocios, pero después de un año los resultados no son buenos y en la primavera de 1876 la Galería cambia de propietarios pasando a manos de dos marchantes de arte llamados Voussod y Baladon. Si su tío había tenido paciencia con Vincent, ellos no tenían ningún lazo familiar que les obligase a aceptar los desplantes e indisciplinas de Vincent , que acostumbraba a poner sus gustos en arte por delante de los intereses de la galería , por lo que en marzo de 1876 es despedido aunque según otras versiones sería el propio Van Gogh el que dimitió . Esta circunstancia no sería vivido como una mala noticia por Vincent, sino más bien como una liberación y toma la decisión de viajar a Inglaterra donde encuentra trabajo como maestro de francés , alemán y aritmética en una escuela privada donde a cambio de su trabajo recibe en pago comida y cama . Pero Vincent no se caracterizaba por su capacidad para conservar mucho tiempo su trabajo y cuando acaba el curso en junio vuelve a estar sin nada.

El más joven de los hermanos Van Gogh, Corneille-Vincent Van Gogh(1867-1900) que moriría en 1900 durante la guerra Anglo Bóer, después de marcharse a Sudáfrica por un fracaso amoroso . Probablemente se suicidó aunque otros historiadores apuntan que murió en combate, pero teniendo en cuenta los antecedentes familiares es muy posible que tomara la decisión de quitarse la vida. Pareciera que todos los miembros de la familia tenían en su mente algo que les impedía llevar vidas tranquilas y felices, sobre todo en el caso de los tres hermanos varones   (imagen procedente de http://www.aloj.us.es ) 

Como ya vimos, su hermana Anne  trabajaba como maestra de francés en Inglaterra y Vincent fue a verla a su casa en  la localidad de Welwyn y consigue encontrar un nuevo trabajo precisamente en lo que pretendía, como predicador suplente del reverendo T. Slade Jones en la localidad de Isleworth . Llega incluso a pronunciar un sermón que  luego contaría entusiasmado a su hermano Theo «Cuando me encontraba en el púlpito, me sentía como quien desde una oscura cueva subterránea vuelve a salir a la plena luz, y es maravilloso pensar que, desde ahora, predicaré el  Evangelio por todo el mundo.» En las Navidades de ese año de 1876  regresa a Holanda para pasarlas junto a su familia que le insisten que debe quedarse allí y estudiar teología lo que le exigía aprobar un examen de ingreso. Mientras piensa si dar ese paso encuentra trabajo en una librería en Dordrecht pero lo deja poco después para viajar hasta Amsterdam donde inicia sus estudios religiosos para preparar el ingreso a la facultad de Teología .  Sus estudios se prolongan hasta 1878  pero no consigue superar las pruebas por su dificultad con el griego y el latín y se dirige a Bruselas para tratar de entrar en su escuela de formación para evangelistas con la esperanza de que allí no fueran tan exigentes con las lenguas clásicas . Pero una vez más  su carácter le meterá en problemas.

Durante su estancia en la Escuela tuvo una pelea con otro de los estudiantes que se había metido con su aspecto físico. Está a punto de ser expulsado pero deciden darle una última oportunidad enviándole a la región minera belga de Borinage, donde los mineros vivían en condiciones casi infrahumanas.Vincent, que escribiría «El que vive sinceramente y encuentra penas verdaderas y desilusiones, que no se deja abatir por ellas, vale más que el que tiene siempre el viento de popa y que sólo conoce una prosperidad relativa.», estaba acostumbrado a estos reveses y no se dejaba abatir por ellos y decide afrontar el reto y  emprender el viaje a Borinage para quedarse a vivir con los mineros y compartir sus duras condiciones de vida.En ese mismo año había escrito a su hermano Theo «Porque en quienes se comprueba de la manera más visible un valor superior, son aquellos a quienes se aplican las palabras: «Trabajadores, vuestra vida es triste; trabajadores, vosotros sufrís en la vida; trabajadores, vosotros sois felices «, son aquéllos que llevan los estigmas de «toda una vida de lucha y de trabajos sostenida sin doblegarse jamás». Es necesario hacer esfuerzos para semejarse a ellos.» y eso es lo que pretendía Vincent , compartir su pobreza hasta el extremo de que él se privaba de todo, hasta de la comida,para dárselo a los mineros y sus familias y si no hubiera sido por los envíos de alimentos de su hermano Theo habría muerto allí.

Uno de los muchos autorretratos que pintaría durante la década en la que se dedicó por completo a la pintura entre 1880 y 1890, la década que recorreremos en el artículo de mañana, pero no quería cerrar esta primera parte sin incluir al menos uno de sus cuadros  para contemplar, en palabras del escritor Juan Antonio Cebrián «su pelo rojo descuidado y greñudo, con barba cerrada y facciones huesudas , casi cadavéricas.» Cuando lees las cartas de Van Gogh te transmiten un profundo sentimiento de soledad y también una gran necesidad de ser amado, una necesidad que quizás sentía desde su infancia cuando no recibió ese cariño por parte de su padre. Escribió en una de sus cartas «Se puede tener, en lo más profundo del alma, un corazón cálido, y sin embargo, puede ser que nadie acuda a él.». Ese corazón al que nadie acudía y que sólo esperaba que alguien le permitiera amar era el suyo , al menos es lo que me transmiten sus palabras (imagen procedente de http://www.biografiasyvidas.com )

En 1879 hay un accidente en la mina y Vincent trabaja día y noche ayudando a los mineros, pero su dedicación a ellos es tan extrema que asusta incluso a sus superiores que creen que va más allá de lo razonable y le ordenan que regrese después de veintidós meses entre los mineros,  y le envían ahora a otra localidad minera, Cuaremes . Durante el tiempo que había pasado con los mineros se sintió desilusionado por la Iglesia pues consideraba que hacia muy poco por ayudar a los trabajadores y los pobres, a los que él admiraba como demuestran estas palabras sobre los mineros «Los carboneros y los tejedores siguen constituyendo una raza aparte de los demás trabajadores y artesanos y siento por ellos una gran simpatía y me sentiría feliz si un día pudiera dibujarlos, de modo que estos tipos todavía inéditos o casi inéditos fuesen sacados a luz» Es entre ellos donde descubrirá su pasión por el dibujo pintando a los mineros y tejedores tal y como había escrito a su hermano . Sus superiores , asustados por el comportamiento de aquel joven que juzgaban enajenado le suprimen el suelo y Vincent decide regresar a Bruselas y abandonar el camino de la religión.

Escribe a su hermano Theo y le cuenta las incertidumbres que tiene sobre  su futuro y le explica, en palabras de Juan Antonio Cebrián «a sus veintiocho años recién cumplidos no conoce los placeres del sexo  y que eso es motivo de desgracia para él. La imagen de Vincent es lamentable : sin amigos y con un aspecto físico deplorable , donde destacaba su pelo rojo descuidado y greñudo, con barba cerrada y facciones huesudas , casi cadavéricas.» Cuando recibe esta carta Theo decide enviarle dinero para que pueda comprarse algo de ropa y comida y a partir de entonces todos los meses apartaría una parte de su sueldo para enviárselo a su hermano y esto lo hará durante el resto de su vida. Gracias al dinero que le envía su hermano Vincent se inscribe en la Academia de Bellas Artes de la capital belga donde estudia dibujo y perspectiva . ¿Habría encontrado por fin su camino, su destino? Escribiría «Cuánta belleza en el arte, con tal de poder retener lo que se ha visto. No se está nunca entonces sin trabajo ni verdaderamente solitario, jamás solo.» Si, cuando pinta ya no se siente solo sino inmerso en la belleza de lo que contemplan sus ojos, pero sus tormentas internas no iban a cesar. Ahora le dejaremos en Bruselas, esperanzado con este nuevo rumbo que ha tomado su vida. Mañana nos adentraremos en los diez años que convertirían a Vincent Van Gogh en uno de los grandes pintores de la historia.